Zusammenfassung
- El Gobierno propone prohibir la educación en casa
- Familias francesas lanzan campaña para proteger los derechos de los padres
ESTRASBURGO (17 de Febrero 2021) – La Asamblea Francesa Nacional ha votado oficialmente a favor de rescindir el derecho de los padres de elegir libremente si educar a sus hijos en casa.
Educadores franceses ahora están haciendo una campaña a favor de la restauración de la liberté frente a las iniciativas para prohibir a los padres la posibilidad de decidir sobre la educación de sus hijos, con la excepción de cuatro circunstancias específicas. El gobierno francés anunció su intención en un comunicado que fue publicado en octubre, citando la lucha contra el “separatismo” como base para una iniciativa controversial. La propuesta también colocaría nuevas restricciones a la independencia de las escuelas privadas. Estas acciones supondrían un grave recorte de derechos que no solo han sido defendidos en la legislación nacional francesa desde 1882, sino que también han sido afirmados por la legislación internacional de los derechos humanos.
“El derecho internacional reconoce el derecho de los padres a decidir sobre la crianza y educación de sus hijos. Los niños nacen de los padres, no del Estado, y deben ser los padres quienes tomen las decisiones sobre cual es la mejor manera de criar a sus hijos,” dijo Jennifer Lea, asesora jurídica de ADF International en Estrasburgo.
“Cada niño es único y un enfoque uniforme para el aprendizaje socava la formación de la generación venidera. La educación en casa puede aportar enormes beneficios a los niños, por ejemplo, a los que tienen dotes excepcionales para la música, la danza o el atletismo y necesitan tiempo extra para perfeccionar sus habilidades; o a los niños que quizá tienen dificultades para aprender al ritmo de una clase concurrida y necesitan más atención individualizada,” continúa Jennifer Lea.
Familias al rededor del país se han unido y han conformado la ‘Liga Francesa de Educación en Casa’ para demandar, a través de un video público de su campaña, que se protejan sus derechos como padres y madres.
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Voluntarios activistas se unen a los padres en toda Europa en su lucha por los derechos de decidir sobre la educación.
Mientras en casi cualquier otro estado europeo se protegen los derechos de los padres a educar a sus hijos en casa, el país vecino de Alemania mantiene una prohibición total. En 2015, Dirk y Petra Wunderlich exigieron justicia frente a la Corte Europea de los Derechos Humanos (ECHR) luego de que las autoridades alemanas abruptamente tomaran la custodia de sus cuatro hijos. El menor tenía apenas cuatro años de edad. La razón fue simplemente que habían decidido educar a sus hijos en casa. Los niños les fueron devueltos, pero solamente bajo la condición de que ellos debían atender una escuela estatal.
Estas restricciones de los derechos de los padres han sido criticadas a nivel internacional. En el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, los Estados han pedido a países incluyendo a España, Noruega, y Suecia que afirmen los derechos de los padres y les permitan decidir sobre la educación que consideran apropiada para sus hijos.
“La propuesta de Francia acerca de la educación en casa se encuentra completamente fuera de consonancia con otras democracias que acogen la educación en casa como parte de una sociedad libre y pluralista. Además, la educación en casa es un derecho humano natural, fundamental y que debe ser protegido. Francia ha firmado a favor de proteger este mismo derecho en tratados internacionales y por lo tanto no debe ignorar sus obligaciones. Privar a los padres de la posibilidad de elegir socava la tremenda responsabilidad que ellos tienen y cae como una bofetada en la cara hacia los millones de padres y madres de familia en los que Francia ha puesto su confianza para conllevar la educación en casa durante la pandemia. Al otro lado de la frontera en Alemania, el caso desgarrador de la familia Wunderlich demuestra las consecuencias devastadoras que conlleva el socavar la responsabilidad de los padres de esta forma. Francia no debe cometer el mismo error. En lugar de ello, el gobierno debería en tomar esta oportunidad para comprometerse una vez más a su proclamado principio de la liberté,” comentó Robert Clarke, Director Adjunto de ADF International, quien además sirvió como abogado principal en el caso de la familia Wunderlich.
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